En las últimas semanas, la escasez de tomates en el mercado se hizo latente para perjuicio de los consumidores, tanto por la oferta limitada del producto en sus diferentes variedades como por el precio elevado. Esto motivó lógicamente una escalada de quejas y reclamos, que tuvieron eco en todos los sectores interesados o afectados, dándole llamativamente algunos de ellos un sesgo o cariz que, lejos de colaborar para la solución integral de la situación, más bien buscaban sacar alguna ventaja de la misma.
Después de haber suspendido el concierto el día anterior a causa de la lluvia, el viernes pasado el estadio que sirvió de escenario para la actuación de la cantante colombiana se vio repleto con casi 60 mil personas. Ese día, los fans de La Bichota, en su mayoría mujeres luciendo un outfit colorido y desenfadado, bailaron y corearon a rabiar los temas de la artista, que se ha ganado el corazón de un enorme público en América Latina, siendo también aclamada en Europa.
Cuando en enero del año en curso fue nombrado el economista Óscar Stark al frente de la telefonía estatal devenida en sociedad anónima, pareció un presagio de buenas nuevas en cuanto a la situación a futuro de la misma. Por un lado, por parte de los funcionarios, a quienes se adeudaba varios meses de salario, y por el otro, la posibilidad, a través de la gestión de Stark -de larga y reconocida trayectoria en el sector público- de comenzar los trámites para liquidar la misma en las condiciones más favorables posibles.
Terminando la semana pasada, en un ameno y también desafiante espacio radial, uno de los periodistas le preguntó al otro “¿De lo acontecido durante los últimos días aquí o afuera, con qué te quedarías como el hito semanal?”, a lo que el aludido respondió sin dudar “con la inauguración del edificio de Google en San Salvador, ese edificio parece del siglo 23″. La respuesta pareció no agradar al primero, porque -así sus palabras- “nada que venga de la mano de un dictador puede ser siquiera considerado”.
Mediante la difusión de la noticia a través de la prensa, un nuevo caso de nepotismo fue descubierto y sacado a la luz, para indignación de todos los paraguayos de bien. Gracias a este mecanismo, absolutamente válido y legal, el efímero nombramiento del joven Alexis Rivas, hermano del inefable Hernán “Justiniano” Rivas en la Entidad Binacional Yacyretá, llego a su fin gracias a la airada reacción ciudadana, informándose oficialmente que la cuestionada resolución quedaba sin efecto. Hasta aquí, todo bien.
¿A quién no le ocurrió?: Habiendo realizado en tiempo y forma los trámites previos, presentado las copias correspondientes y abonado las tasas, cuando fuimos a retirar el documento requerido nos dijeron que aún no estaba. “No puede ser” pensamos mientras verificamos la contraseña y vemos que sí, es la fecha correcta. Y se la mostramos al funcionario con mucha seguridad y aplomo, convencidos de que la presentación de la misma con ese dato va a cambiar mágicamente su respuesta original. Detrás del mostrador y con el papelito en la mano, vuelve a posar la vista en la pantalla que tiene enfrente y, dependiendo del humor con que haya amanecido, nos responderá con mayor o menos amabilidad “el sistema estuvo con problemas, por qué no vuelve la semana entrante, seguro que ya va a poder retirar”.
La mbói chiní (víbora de cascabel) atravesaba el camino de tierra, y se la podía apreciar de esta forma en toda su extensión, de poco más de un metro. Rápidamente, el baqueano buscó un palo largo para darle un certero golpe en el medio mismo, dejándola así casi inmovilizada. Al acercarnos más, pudimos ver cómo, aún en esta situación, escondía la cabeza para defenderse y, apenas tuviese la oportunidad, clavar los dientes en cualquier imprudente que se pusiera a tiro.
La Semana Santa conlleva sentimientos profundamente arraigados en los paraguayos a través de costumbres que se pasan de generación en generación, algunas de tinte marcadamente religioso y otras con un contexto más social y familiar. Estas tradiciones, como es normal, también cambiaron a través del tiempo, pero no cabe duda de que, sin excepción, esta celebración y días feriados consecuentes están muy presentes en muchos -y muy queridos- recuerdos que todos tenemos.
Dentro del marco de un tejemaneje jurídico & político, que por añadidura exhala un fuerte tufo a satisfacción de egos y venganzas personales, el expresidente Mario Abdo Benítez junto a un grupo numeroso de funcionarios que lo acompañaron en sus gestiones de gobierno, fueron objeto de una denuncia penal hace un par de semanas. Toda la cuestión, al margen de la legalidad y pertinencia o no de la acción, tiene un indisimulado cariz de vendetta.
Como sociedad, constantemente somos testigos, beneficiarios o víctimas de sucesos que nos afectan de manera directa o indirecta. Y también como sociedad, reaccionamos de distintos modos a ellos, de acuerdo a la forma en que estos acontecimientos irrumpen en nuestras vidas y de alguna o varias maneras generan cambios, que pueden ser positivos o negativos.