Intendente denunciado por presunto desvío de G. 30.000 millones vuelve a postularse

SALTO DEL GUAIRÁ. El intendente de esta ciudad, Carlos César Haitter (ex PDP) oficializó su renuncia en la fecha para postularse a un nuevo periodo (rekutu). El mismo tiene en contra un reporte de hechos punibles contra el patrimonio por más de G. 30.000 millones, denunciado ante la Fiscalía por la Contraloría General de la República (CGR), entre varios otros hechos.

Intendente renunciante Carlos César Haitter.
Intendente renunciante Carlos César Haitter.Rosendo Duarte

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Las 12:04 de hoy, Haitter dio mesa de entrada en la Junta Municipal a la nota donde presenta su renuncia y solicita que sea designado un concejal municipal para terminar el periodo. De inmediato el presidente de la Junta, Silvio Escobar (ANR), afín a Haitter, convocó a una sesión extraordinaria para las 19:00. El nombre del concejal Wilson Báez (PLRA), también oficialista, es el que más fuerte suena para suplir el cargo vacante.

La “carta de presentación de Haitter”, que va por el tercer periodo mediante un movimiento propio esta vez: “La Fuerza de la Esperanza”, es el de ser el intendente del Paraguay que mayor monto de dinero presuntamente desvió de la administración pública, según la CGR: G. 30.171.916.451.

Tiene un proceso abierto por el Ministerio Público por dicho reporte y además espera la decisión de la justicia sobre otro proceso por presunto daño patrimonial por aproximadamente por más de G. 1.300 millones, correspondiente al primer periodo de su gobierno (2006 – 2010). Llamativamente, el Tribunal de Apelaciones de Salto del Guairá, encabezado por el camarista Gustavo Brítez Miranda tiene cajoneado desde agosto el año pasado la apelación presentada por el fiscal Vicente Rodríguez contra una sospechosa exculpación de Haitter por parte de dos jueces de sentencia: Sofía Jiménez y Bonifacio Rojas.

Además, todas las obras ejecutadas por la comuna a cargo de Haitter son objetos de serios cuestionamientos por parte de concejales opositores y la ciudadanía, ya sea por falta de calidad o presunta sobrefacturación.

En los últimos tiempos, aprovechándose de la declaración de emergencia por la pandemia del Covid-19, Haitter repartió dinero a sus allegados mediante adjudicación de obras sin cumplir los requisitos legales de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas. Usó y abusó de las contrataciones directas y la entrega de miles de millones a empresas amigas mediante la vía de la excepción.

En relación a la multimillonaria denuncia de desvío de fondo, Haitter aseguró que va refutar punto por punto. Asimismo, afirma que sufre persecución política y que hay malas intenciones y manos negras detrás de las denuncias en su contra.

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